De la mano de un hombre que fue vital en los primeros tiempos, Pedro Iriart Legourburu (luego se le impuso su nombre al predio), en 1938 se empezó a construir la portada y los vestuarios del estadio de la localidad del Penal.
Las imágenes son de mediados de 1939. El ingreso ya estaba a punto de ser habilitado y muy avanzada la edificación de los vestidores de locales, visitantes, árbitros, utilería y depósito de limpieza. También incluía un lugar cubierto para ver los partidos y un sector en planta alta que luego sería destinado a la prensa, a medida que los medios fueron requiriendo un espacio.
Se utilizó durante casi seis décadas, hasta que se edificó un nuevo espacio cercano a la entrada. A la vez, tras unos años, los viejos vestuarios tuvieron algunas refacciones.
Fuentes: Diario El Popular y Olafútbol
Comentarios